30/3/10

EMOCIÓN

Las emociones son pensamientos que se experimentan, hay algunos que pasan por tu mente sin que siquiera los notes, pero hay otros que se cuelan en tu cuerpo haciéndote sentir una sensación, que puede ser agradable o desagradable.

Los pensamientos que se hacen notar de esta manera son fragmentos de lo que tu crees ser, al ser parte de la identidad que has asumido necesitan manifestarse para que puedas continuar con el proceso de identificación de ti mismo, el pensamiento, al ser energía, es capaz de afectar todo el equilibrio químico de tu cuerpo y generar reacciones en cada una de tus células, de pronto una aguda sensación de bienestar o malestar te invade y si no eres conciente se apodera de ti y puede llegar a afectar, positiva o negativamente, no solo tu cuerpo físico sino también tu entorno.

Cuando estás feliz todo parece sonreír, un pensamiento dichoso ha desencadenado una serie de reacciones en toda la química de tu cuerpo, segregas hormonas, enzimas y compuestos que hacen que te sientas relajado, liviano y a gusto; cuando estás deprimido o enojado, el mundo se transforma en un feo lugar, el cuerpo se contrae, se tensiona y secreta sustancias perjudiciales para tu salud.

Las emociones son como el alimento que entra en tu cuerpo, seleccionas lo que comes, aunque muchas veces no lo hagas adecuadamente, después de ingerirlo el proceso natural sigue su curso, tu metabolismo selecciona los nutrientes y sustancias que necesita para funcionar correctamente y elimina lo que no le sirve a través de la orina y las heces, si las retienes, si tu sistema renal o digestivo falla, tu cuerpo se intoxica y puede llegar a morir.

Lo mismo sucede con las emociones, sin embargo no te das cuenta de cuales permites que entren en tu mente, las recibes sin discriminarlas, el cuerpo te envía una señal de alarma cuando una emoción negativa se hace presente, el sistema emocional no tiene un mecanismo natural para eliminar lo que le hace daño o no le sirve, como lo tiene el cuerpo, sin embargo, las emociones negativas son para la mente lo que la orina y las heces son para el cuerpo, te intoxican, deben ser sacadas o de lo contrario pueden hacerte mucho daño.

Las emociones positivas alimentan tu mente, las negativas la intoxican, al ser la mente el mecanismo de percepción del mundo externo puede nutrirlo o contaminarlo con lo que contiene, por eso es tan importante eliminar de ella lo que no contribuya a tu paz y dicha.

Periódicamente el cuerpo te envía señales para que inicies el proceso de excreción de toxinas, cuando las recibes tu vas al baño y ¡en privado! haces lo que él te pide, siguiendo con la comparación ¿es adecuado que lo hagas en publico, delante de otros? Por supuesto que no, entonces ¿Por qué lo haces con tus emociones? Para eliminar las emociones negativas es indispensable permitir que se manifiesten y se expresen para que no sigan contaminando tu mente, no se te ocurriría eliminar tus toxinas físicas en presencia de nadie, así de escrupuloso deberías ser con tus toxinas emocionales, sacarlas en publico contamina tu entorno – no las eliminas, las trasmites – la reacción que causa la expresión de tu negatividad se suma a ella fortaleciéndola, por lo tanto te sugiero que siempre que una emoción negativa te acose, busques un lugar privado y hagas lo que sea necesario para deshacerte de ella a solas.

Puedes escribir todo lo que estás sintiendo, golpear una almohada - una pared no es una buena elección – gritar, patalear, llorar y lamentarte ante un espejo, será hasta divertido ver allí tu patética expresión, observa como todo tu rostro se transforma por la ira o la tristeza, observa los pucheros que haces, las venas que se brotan, la piel enrojecida, la nariz inflamada, los ojos hinchados, permítete la más autentica y plena expresión de tu emoción negativa y observa como se aleja sin resistencia de ti.

Se ha ido sin afectar a nadie, sin causar daño, sin contaminar tu entorno, simplemente desapareció sin dejar rastro, tu basura mental está en donde debe estar y no en la sala de tu amigo o en el anden de tu vecino, has tomado una actitud emocional ecológica, respetuosa de tu ambiente y responsable por su estabilidad.
Diana Rodriguez Angulo

26/3/10

HISTORIA

¿Quién escribe la historia de tu vida? ¿Tu? ¿Alguien o algo más? ¿El destino? Al igual que todo en tu vida, la respuesta a esta pregunta depende de tu elección.

Puedes asumir tu existencia como una historia escrita sobre la cual no tienes el menor control, todo está predestinado y te dejas llevar resignándote a vivir lo que fue preparado para ti, así no sea lo que deseas, este enfoque te exime de la responsabilidad y te deja en la cómoda posición de victima del destino.

También puedes pensar que se trata de un juego en el cual tú comienzas la trama y en determinado momento le cedes a otro jugador la tarea de continuarla, entonces cuando toma un curso que no deseas, recapacitas y retomas la autoría, este juego se puede repetir varias veces y con diferentes jugadores hasta que al fin te das cuenta de que ellos en realidad no saben lo que persigue el argumento y lo único que hacen es retrasar el final deseado.

De repente un día, te sientas a escribir la historia de tu vida, decides que los capítulos anteriores fueron apenas bosquejos y los borras del texto, imaginas una trama magistral en la cual tu eres el héroe, resuelves que en esta historia no hay antagonistas sino aliados y creas un escenario acorde con tu nuevo rol, escoges de un infinito catalogo de posibilidades aquellas que más se ajustan a tus deseos.

Dejas volar tu imaginación y no le pones limites a tus sueños, te regodeas contemplando tu maravillosa creación, día a día te concedes más cualidades, dones y talentos, te sientes complacido del maravilloso personaje que eres y lo consientes llenando su entorno de regalos, conviertes tu vida en un extraño cuento en el cual no hay brujas malvadas, ni ogros, ni lobos feroces, sólo hadas madrinas, ángeles guardianes y un genio maravilloso que todo te lo concede.

Lo más extraordinario es que todo se manifiesta en tu vida, lo que escribes con tus pensamientos, expresas con tus palabras y bendices con un autentico sentimiento de dicha y gratitud se convierte en una formula infalible de creación, tu historia es recibida con regocijo por el universo que se complace en hacerla aún más maravillosa.

Tomate un tiempo en la mañana para escribir el argumento de ese día en tu cuento de hadas madrinas, ángeles y genios, juega a agregarle elementos fantásticos que a primera vista te parecen imposibles de lograr, pídele a todos los personajes que colaboren con tu historia y cierra tu escrito dando gracias por el maravilloso día que tienes por delante.

Crea tu día y entrégalo al universo, sal al mundo con la confiada actitud de experimentar lo que has decidido y asómbrate con los resultados, escribe tu historia y vívela plenamente, pues eres el cocreador de tu realidad y el autor de tu experiencia.

Diana Rodriguez Angulo

25/3/10

COMUNICACIÓN


Todos estamos en permanente evolución, si te comunicas con la vieja imagen de los demás y no con su ser presente te perderás la maravillosa experiencia de percibir su crecimiento.

Una comunicación – comunión, sólo es posible en presencia del amor, si el miedo no se interpone puedes realmente comunicarte, porque no existe obstáculo para la verdad.
Cuando juzgas cortas la comunicación, percibes lo que has forjado con tu mente, te niegas la oportunidad de ver lo actual en ti y en el otro, lo que está allí en ese momento y no la imagen que has fabricado con retazos de recuerdos, no te percibes a ti mismo y a los demás como son en el presente sino como un concepto inmutable que te impide ver la evolución y crecimiento que han alcanzado y dejas que esa percepción te robe la visión de la verdad.
En un sentido práctico, escuchas lo que esperas escuchar, ves lo que esperas ver y generas conflicto donde no debería existir sino comunicación, ya has decidido lo que vas a dar y a recibir y por lo tanto no aceptas otra opción, sabes de antemano que este intento de comunicación terminará en una lucha, cada uno querrá imponer su criterio y defender su posición de la del otro, entonces no escuchas sino tu propia voz proyectada en el otro, tu imagen, forjada por ti mismo, en sus palabras y actitudes y antes de comenzar ya has condenado este intento de comunicación como inútil.
¿Por qué? Porque estás defendiendo una mentira, luchas por conservar tu imagen y tampoco te permites modificar la del otro, que también has creado en tu mente, toda barrera se derrumbaría si solo por una vez te permitieras ver a tu interlocutor sin pasado, como si recién lo conocieras.
Es más fácil tratar de ver en los demás tu perfección que en ti mismo, convives todo el tiempo con tu propia imagen, en cambio puedes ignorar el concepto que tienes del otro, puedes variar tu percepción para que te permita ver más allá de su apariencia, cuando logres penetrar con esa luz en su verdad, estarás al mismo tiempo reconociéndote en él y vislumbrando una verdad que también te pertenece, entonces habrá verdadera comunicación, no hay una imagen que defender, la obsesión por tener la razón queda opacada por el asombro que te causa el observar al otro desde una nueva perspectiva en la que te permites la libertad de descubrir qué ha cambiado en él, qué hay de nuevo en esa persona, cuanto ha crecido, qué cosas ha aprendido y puede aportarte, entonces la comunicación deja de ser una competencia de criterios para convertirse en un respetuoso intercambio de ideas que los enriquecen a ambos.
Dejas de ver a los demás como imágenes terminadas y archivadas en tu memoria y cada encuentro te revela a un nuevo ser, fruto del aprendizaje que la experiencia ha dejado en él, que lo transforma cada día y te brinda una oportunidad única para darte cuenta del constante proceso evolutivo del hombre a través de la vida, nada permanece invariado, todo cambia y mucho más el ser humano al que sus experiencias moldean como el escultor a la arcilla entre sus manos.

24/3/10

FRACASO

Si pudieras ver el panorama general, comenzarías a considerar al fracaso como uno de los mejores aliados de tu crecimiento, nada ofrece una mejor oportunidad de evolución que las circunstancias adversas.

Algunos fracasos son ventanas que se cierran para permitirte ver una puerta de oportunidad más grande, otros son postes indicadores de un camino errado, otros más son finales necesarios que dejan espacio a nuevos comienzos, muchos de ellos son simplemente la respuesta a tus peticiones.

Cada fracaso es una alarma que te invita a despertar, comienzas llorando, quejándote y sintiéndote victima por un tiempo y luego, lentamente, te vas dando cuenta de tu responsabilidad en esta situación: hiciste una mala elección, tomaste una decisión equivocada, pediste alguna cosa que requería de este fracaso para ser manifestada, si, muchas veces eso de lo cual reniegas es la respuesta a una creación que hiciste de manera consciente o inconsciente, pues aun no comprendes el poder de tu intención y de tus palabras y pensamientos creadores de realidad.

¡Ten cuidado con lo que pides porque lo obtendrás! es un poder que posees pero aún no sabes utilizar, ignorar las leyes de la creación no te exime de sus efectos, eres causa de todo en tu vida y ejerces este poder sin responsabilidad, entonces cuando fracasas te sientes victima de las circunstancias y con tu actitud negativa empeoras las cosas, porque sigues creando más y más de lo mismo.

Despertar es tomar conciencia de ese poder, comenzar a preguntarte: ¿de donde proviene?, ¿por qué lo posees?, ¿qué te hace merecedor de ese privilegio?, preguntar es una petición de respuestas que te conducen poco a poco a la verdad, al descubrimiento de lo que eres y de todo lo que puedes hacer con tu vida, si eliges ejercer tus dones con responsabilidad.

Una primera pregunta te llevará sin duda por un camino de conocimiento que no recorrerás solo, esa pregunta inicial es esperada ansiosamente porqué expresa tu intención de conocer la verdad, has pedido salir de la ignorancia y tu petición ha sido aceptada.

Sin duda tu fracaso te ha regalado un tesoro, el mayor tesoro al cual puedas aspirar en tu vida: conocer quien eres, entender tu grandeza y tu poder, acceder a la fuente del amor divino que habita en ti, aprender las leyes de la creación y aplicarlas sabiamente para recibir los regalos que esperan que expreses tu intención para manifestarse, encontrar un refugio en el cual guarecerte mientras la tormenta amaina, no te imaginas el caudal de bendiciones que obtendrás como repuesta a los interrogantes que suscitó un fracaso.

Diana Rodriguez Angulo

19/3/10

SERENIDAD

Vive sereno, alejado de la lucha o el conflicto contra algo o contra alguien, atraviesa cada instante conscientemente, alerta, vivo y confiado y deja que se vaya en paz sin aferrarte a él.

No ataques a nadie en tu pensamiento, mucho menos a ti mismo, no admitas los juicios, la culpa y la ofensa en tu dialogo mental, no hagas dramas ni sufras en vano, entrégate, acepta, actúa y espera confiado el siguiente instante.

Habla serenamente, sin imponer tu criterio, sin ofender, criticar, ni censurar, haz de cada palabra que salga de ti un acto de amor, si por alguna razón debes hablar de algo que te afecta y necesitas comunicar tu inconformidad hazlo con firmeza y seguridad pero con dulzura y en paz, controla tu actitud y el tono de tu voz, si te alteras sólo lograrás que el otro se ponga a la defensiva y no te escuche.

Escucha con tranquilidad lo que te digan así te desagrade pues en esas palabras puede haber un mensaje del universo, diseñado especialmente para ti.

Comunícate con serenidad, renuncia a tener la razón aún si sabes que la tienes, si tienes que convencer a alguien de lo que piensas es porque dependes de su reacción para sentirte seguro.

Procede con seguridad sabiendo que cada acto que surja de ti en un estado de consciencia alerta será el apropiado para ese momento, así sabes lo que haces y porque lo haces, trata de no obrar por impulso, actúa a tu favor y no en contra de nadie, como acción y no como reacción, para sembrar y construir y nunca para atacar o destruir.

Vive tranquilo sabiendo que todo depende de ti, que tu actitud determina tu entorno y no hay circunstancia adversa para una persona que acepta y comprende el fluir de la vida con sabiduría.

Di lo que sientes sin atacar o culpar, sé claro al expresar que no estás dispuesto a tolerar que abusen de ti o te maltraten, no te resignes a seguir viviendo lo que no es de tu agrado, aléjate de las personas o circunstancias que no te convienen sin pretender que cambien o se adapten a tus deseos.

Pero si un día no puedes más y estallas en ira, llanto, drama o impaciencia, acéptalo dócilmente y sigue adelante sin culpas, disfrutando la serenidad que te brindó el desahogo, porque serenidad es también reconocer tu humanidad, entender que estás acá para aprender, para caer y levantarte cuantas veces sea necesario hasta que aprendas a caminar firmemente por la vida.


Diana Rodriguez Angulo

18/3/10

TRISTEZA

No permitas que tus emociones se agazapen dentro de ti, afróntalas con coraje, no las rechaces, ni las niegues, las emociones reprimidas y negadas contaminan tu espíritu, te envenenan a ti y a todo lo que te rodea, obsérvalas sin juzgarlas, siente la sensación física que causan, hazte consciente de ellas, no les pongas nombre, siéntelas plenamente porque están ahí dentro de ti y como el agua, si no se dejan correr se estancan, se quedan dentro y siguen haciendo daño.

La tristeza como la alegría son expresiones de tu ser autentico, disfruta de una como de la otra, son aspectos de tu estado interior que conviven como polos opuestos y que te permiten la comparación para entenderlos.

Una profunda tristeza puede convocar momentos maravillosos de inspiración, invitarte a la contemplación de sus causas y facilitar un encuentro con tu lado oscuro que intenta manifestarse, no lo silencies, permite que te revele tus temores, tu heridas más profundas, conoce a través de la tristeza tus puntos débiles para que cuando recobres la alegría sepas enfrentarlos y conjurarlos a tu favor.

Hay cierto encanto en la tristeza, la melancolía te envuelve y te invita al recogimiento, cuando estás triste buscas la soledad como consuelo y sientes que nadie más que tú mismo puede consolarte, una maravillosa oportunidad de abrazarte con tu ser más intimo, aceptar tu debilidad y encontrar allí adentro la fortaleza que necesitas para superar la causa de tu desolación, deja correr las lagrimas como un bálsamo sanador que te devuelva la fe en la vida.

No luches contra ella, acógela, acéptala, consiéntela, si sientes ganas de llorar, llora con toda tu alma, si deseas estar solo aíslate y haz que respeten tu decisión, si no sientes ganas de hacer nada no lo hagas, el mundo seguirá girando sin ti, vive tu tristeza tan intensamente como puedas, una tristeza reprimida puede convertirse en depresión, apatía e indiferencia, acepta esos momentos con la misma gratitud que aceptas los luminosos, son partes de ti mismo que buscan expresarse, aspectos escondidos que reclaman tu plena atención para ser transmutados por la luz de tu consciencia.

Los mejores poemas, las más bellas canciones, las obras de arte más sublimes han sido creadas en momentos de intensa tristeza, de profunda decepción, la sensibilidad se intensifica frente a la sensación de vulnerabilidad que deja la tristeza y busca expresarse desde el fondo del corazón, la mente se hace a un lado porque no soporta el recuerdo de aquello que causa el dolor y el alma se expresa libre del análisis y llena de autentica inspiración.

Diana Rodriguez Angulo

17/3/10

LIMITES

Todo límite está en tu pensamiento, toda limitación viene de tu mente, puedes hacer lo que quieras, pensar lo que quieras, sentir lo que quieras y ser lo que quieras.

Lo que sucede es que todo lo que haces, piensas, sientes y quieres siempre esta dirigido a un objetivo proyectado al mundo que te rodea, me explico, todo cambio es posible en tu interior, pero si lo que pretendes es cambiar lo exterior seguramente fracasarás, por eso la vida te parece una lucha permanente por superar tus propios límites.

Todo esfuerzo dirigido a modificar la realidad es un absurdo porque lo externo es el límite, dentro de ti no hay límite posible, eres un universo de posibilidades, un potencial ilimitado, una cosecha perfecta y un logro ya terminado.

Dentro de ti habita el mundo y tú haces de él un reflejo de tu interior, sólo allí no hay límites, en ese espacio infinito tú eres lo que eliges ser, esa elección no depende de nada externo pero lo que elijas acerca de ti mismo se reflejará totalmente en el mundo que ves afuera.

Tu miopía consiste en observar el reflejo que te devuelve el mundo en lugar de mirarte directamente, distorsionas tu realidad al compararla con la vieja fotografía que has hecho de ti: un catalogo de imágenes, un listado de requisitos que revisas en tu mente cada día sólo para decepcionarte porque las exigencias del mundo son irreales e inalcanzables para la gran mayoría.

No eres un objeto que deba cumplir una serie de requisitos para ser comprado, no eres un producto de consumo que deba ser aprobado por los demás para ser valioso, eres un ser ilimitado en sus posibilidades, lo que sucede es que has creído que el fin último de tu existencia es complacer las exigencias de ese catalogo, cada vez más extenso, que determina lo que se te exige para tener éxito en el mundo.

Tu capacidad de decisión sobre tu mundo interior es ilimitada, por eso es allí donde debes concentrar toda tu energía, ese es el único mundo que puedes cambiar y modificar a tu antojo, allí puedes ser lo que elijas, dentro de ti puedes crear un mundo perfecto, puedes ser un artista, un genio, un mago, un adivino, un santo o un pecador, escoger los colores de la paleta con la cual dibujarás el mundo, controlar lo que piensas y sientes, decidir lo que haces y lo que eres.

El límite aparece cuando esa elección se sale de ti y se proyecta, dentro de ti eres amo y soberano, pero afuera eres una parte del todo y como tal no puedes pretender que ese todo se pliegue a los deseos de una parte. Pero si dentro de ti eres ilimitado serás conciente de que lo que cambie dentro de ti, modificará tu percepción de ese todo.

Tus actos, palabras, decisiones y reacciones estarán impregnados de una conciencia nueva que ha comprendido que al no haber límites internos tampoco los habrá en el exterior e iras por la vida confiado, sereno y alegre, sin una mente encasillada en las exigencias limitantes de tu ego.

La imagen real, la obra de arte está dentro de ti, la de afuera es una caricatura formada con los trazos de muchos autores que copian lo que ven en el espejo roto de las apariencias, si sigues ese modelo te mantendrás afuera de los límites de tu perfección, pero si miras la obra de arte colgada en tu interior todo lo que veas tendrá la misma cualidad y podrás contemplar la divinidad en ti mismo y en todo lo demás.

Diana Rodriguez Angulo

16/3/10

FELICIDAD

El don de Dios para ti y su única Voluntad a la cual te opones, Él espera paciente y anhelante a que aceptes todo lo que tiene para ti y veas los amorosos mensajes contenidos en los milagros cotidianos que ignoras por estar persiguiendo la felicidad donde no puedes encontrarla.

Él ve sin juzgar como rechazas todo lo bello que pone ante tus ojos a cada instante, caminas por el salón del tesoro y ¡no puedes verlo! Estas cegado por la expectativa y el temor, lleno de recuerdos y resentimientos que hacen invisibles para ti los regalos que se te brindan todo el tiempo, la felicidad es para ti una palabra que solo se conjuga en futuro, inalcanzable en el ahora.

Tu mente la ve como objetivo y no como realidad, siempre estará fuera de tu alcance mientras creas que depende de algo externo a ti, que alguien puede brindártela, que depende de algún objeto, que aparecerá algún día en tu vida, entre tanto ella te observa serena desde un lugar donde jamás se te ha ocurrido buscarla.

Tu intención es un mandato, sin embargo hasta ahora solo ha sido perseguir la felicidad y no alcanzarla, ¿te das cuenta de la trascendencia de esta elección? Tu mente ha escondido la felicidad en un lugar ubicado en la penumbra de lo irreal, un espacio llamado futuro en el cual nunca podrás estar.

Vas remando en un barca, persiguiendo un horizonte que se ve cercano pero fuera de tu alcance, avanzas y la distancia que te separa de la meta siempre es la misma, es una ilusión, le darás varias veces la vuelta al mundo y en tu penoso viaje aparecerán islas que esconden un tesoro, tal vez te detengas en ellas pensando que son apenas una escala en tu recorrido, no puedes verlo pero esa isla formaba parte del horizonte que perseguías con tanto empeño y ahora que desembarcas en ella sigues pensando que tu incierta ruta te ofrece un mejor destino.

La felicidad está en la tierra firme del ahora, tal vez no parezca el continente perdido que tanto buscas, ella se suele disfrazar de sencillez, se esconde detrás de la rutina y de la simpleza de lo cotidiano, su diáfana presencia no es contundente, no trae consigo un sequito de pregoneros que te griten “llego la felicidad, tómala y no la dejes escapar”, parece efímera porque te rodea tocando suavemente la puerta de tu alma, para que le permitas entrar en ella y ocupar su hogar.

Prepara dentro de ti un lugar acogedor para recibirla, limpia la casa para ella, deshazte de tus creencias limitantes, recibe tus dones tomando conciencia del momento presente, acepta sin dudar que la felicidad es una ofrenda que se te hace en el ahora, que no puedes tenerla mañana, en una hora, en un año o en el minuto siguiente, reconoce que depende de ti darle la bienvenida, que ella no se encuentra en las cosas o circunstancias externas sino más bien en la actitud que elijas tener ante la vida.

Es tu actitud la llave que le abre la puerta a la felicidad para penetrar en tu interior y quedarse allí para siempre, aceptación, agradecimiento y asombro ante el regalo de cada segundo, tu responsabilidad es ser feliz independientemente de lo que suceda a tu alrededor, es una elección de tu conciencia, es ella la que le da realidad a tus regalos, la que dispersa la niebla que te los oculta, tu plena presencia es el mapa del tesoro y el lugar marcado con una X está bajo tus pies justo en el ahora.

Diana

15/3/10

CONTROLAR

Hay dos tipos de control, el que pretendes ejercer sobre lo externo y el que puedes ejercer sobre ti mismo.

No es igual, el primero te llena de insatisfacción, te mantiene en un estado permanente de ataque y defensa, te ata al conflicto y al sufrimiento, nada afuera de ti puede ser controlado, nada ni nadie que no seas tu mismo puede ser puesto bajo tu control.

Lo sabes y sin embargo te empeñas en seguir con tu inútil lucha, forzar las soluciones y los desenlaces, educar a los demás para que vivan y actúen como tu deseas, acomodar el mundo a tus expectativas, todo hacia fuera, todo el esfuerzo proyectado a cambiar, modificar, mejorar o alterar lo que no depende de ti.

En esta lucha inútil te olvidas del único esfuerzo que rinde verdaderos frutos: esfuérzate por ser feliz, no me refiero a conseguir cosas que te den seguridad sino a alcanzar el estado del ser que te brinde felicidad duradera.

Ese esfuerzo por ser feliz se fundamenta en el control sobre ti mismo, el único posible, todo intento sobre algo más que eso es además de inútil desgastante, el primer paso es controlar tu obsesión por controlarlo todo, el primero y tal vez el único porque cuando renuncias al control alcanzas la paz.

Haz el intento, primero que todo permite que los demás sean como son, es en esa diversidad de caracteres que radica el encanto de las relaciones, si todos fueran el reflejo de lo que tu esperas no cumplirías con el objetivo principal al relacionarte con ellos, que es justamente experimentar todas las facetas del ser en los demás, cada persona es una maravillosa y única composición, cada cual expresa un aspecto diferente del todo del cual forma parte, esa variedad de tonos conforman la melodía de la vida, si todos tocaran su canción en la misma nota que tu, la música sería aburrida y simple.

Lo mismo sucede con las experiencias, si fueran predecibles y ajustadas a un programa, la vida perdería su encanto, si todo sucediera de acuerdo a tus planes ¿dónde quedaría la aventura de vivir? Lo que hace la existencia fascinante es el caos de vivirla, la libertad radica simplemente en afrontar la existencia con la actitud que elijas y no en reconciliarla con tus deseos.

Controlar es anular en todo el sentido de la palabra, limitar y condicionar, negarte la libertad de experimentar lo desconocido y aprender de ello, acepta lo que es diferente a ti pues en esa diferencia es que puedes encontrar tu particularidad, para ser único tienes que ser distinto, las mejores experiencias son siempre las más inesperadas, los mejores logros son aquellos que aparecen de la nada cuando menos los esperas, la existencia es más hermosa si la vives como un juego de azar, un enorme tablero en el cual te mueves, cada decisión es un lance de dados, ahora pierdes, luego ganas, avanzas y retrocedes en un permanente flujo de posibilidades, un azar aparente porque todo en este juego tiene un propósito.

Lo único que puedes controlar, como jugador, es la manera de jugar: renegar o divertirte, pelear con los demás jugadores o disfrutar su compañía, jugar honestamente o hacer trampa, tu pones las reglas, defines las estrategias, asumes la actitud que quieras y juegas, eso es todo lo que puedes controlar, lo demás no depende de ti.

Diana Rodriguez Angulo

10/3/10

ETERNO

Estás aquí sólo por un tiempo pero para grandes cosas, esta vida es apenas una etapa de tu camino y tu verdadera misión tiene mucho que ver con el reconocimiento de lo que Eres.

Si te ves como un cuerpo que algún día desaparecerá, todo tu esfuerzo estará enfocado en satisfacer las necesidades de tu identidad corporal, sin embargo algo dentro de ti te dice que perdurarás y trascenderás más allá de la muerte, cuando haces este reconocimiento de tu eternidad concientemente, tu enfoque cambia, comienzas a valorar lo que perdura y a restarle importancia a lo perecedero.

Te lleva algún tiempo comprender lo que es realmente valioso y vale la pena conservar, lo que antes era un fin, se convierte en un medio para andar por la vida libre y tranquilo, te das cuenta de que las cosas que posees, tu prestigio y posición, son solo herramientas para tu plenitud y no el objetivo principal de tu paso por este mundo.

Te preguntas entonces ¿a qué vine?, ¿cuál es mi propósito en esta vida? al principio te sientes un poco confundido, la lucha pierde motivación, ya no deseas combatir, la competencia dejó de estimularte, entonces te vuelves hacia esa parte tuya que es sólo amor y paz en busca de consuelo, ¿qué me está pasando? Lo que te hacía levantar cada mañana pierde sentido de repente, hay una sensación temporal de inutilidad, de falta de propósito, un fuerte llamado de tu ser que te invita a reconsiderar tu vida, se abre la ventana al despertar.

Este cambio puede ser espontáneo, sin ninguna razón aparente te ves de pronto impulsado a buscar, a preguntar y a cuestionar tus más arraigadas creencias, sin embargo la mayoría de las veces el llamado llega por medio de una situación extrema: la ruina o el fracaso, la muerte de un ser querido o la cercanía de tu propia muerte, la soledad, el fin de una relación, algún evento en tu vida que te permita apreciar la fragilidad de todo lo que has tenido en tanta estima.

Tu dolor y desconcierto son tan fuertes que te obligan a buscar la fortaleza que necesitas para soportarlos y superarlos, entonces reconoces que no hay nada externo a lo cual aferrarte, cierras los ojos y preguntas ¿por qué a mí?, ¿qué he hecho para merecer esto?, ¿qué estoy pagando?, en ese momento una delicada voz te susurra palabras de aliento, una paz desconocida invade todo tu ser y sientes el amor protector de Dios envolviéndote en sus amorosos brazos, en medio del momento más amargo descubres el verdadero tesoro que tanto te has negado, la luz de tu verdad se enciende, una pequeña llamita será suficiente para iniciar tu despertar.

Nunca más te sentirás solo, ese sagrado momento bastará para tomar las manos de Dios y sentirte seguro en su presencia, regresarás al mundo transformado y el llamado seguirá repitiéndose cada vez con mayor frecuencia, tu confusión se debe a que se ha despertado en ti el deseo primordial, tu Ser ha decidido manifestarse y tomar su lugar en tu conciencia, has sido elegido para recordar quien eres en verdad y desde ese momento comenzarás a cumplir tu verdadero propósito.

¿Cuál es ese propósito? Que seas libre, sereno y feliz, que camines por la vida con paso firme de vencedor, que te conviertas en la luz que guíe a tus hermanos hacia su propio despertar y que al ser plenamente conciente de la brevedad de todo lo que antes valorabas tanto, reconozcas que el único tesoro digno de conservar es aquel que puedes llevar contigo, para iluminar con tu presencia el mundo y reconocer gozoso la eternidad de tu Ser.

9/3/10

CONSCIENCIA

Vivir en un estado de consciencia, es despertar del sueño profundo en el cual has vivido en un total abandono de ti mismo, perdido en medio de una maraña de pensamientos, conceptos, prejuicios, recuerdos y proyecciones, alejado de la realidad, cegado por las ilusiones, acosado por un pasado que pretendes evadir viviendo en el futuro, proyectando tus esperanzas de libertad y realización a un espacio inalcanzable ubicado por fuera de tu presente.
Caminas por la vida aferrado al pasado o ansioso a la espera de lo que ha de venir; date cuenta, el tiempo es difuso como el agua, se desliza presuroso entre las manos, tan efímero que no logra mojarlas, tan eterno que solo existe ahora y ese ahora es todo lo que tienes.
Ya no puedes escuchar la música de ayer, tampoco probar el bocado de mañana, el placer no se puede atesorar, tus sentidos son opacados por una mente que ignora la gloriosa realidad para sentir con el recuerdo viejas sensaciones del pasado.
Camina, come, escucha, mira, huele y palpa plenamente consciente, dándote cuenta, sintiéndolo, sólo así dejarás de perderte lo sagrado de la vida, hazlo todo pleno de consciencia y lleno de ganas, disfruta cada instante, sólo si vives cada segundo con sentido lograrás estar realmente vivo.
Caminan dormidos por la vida los que ignoran la mágica experiencia de sentir, agonizan los que corren afanados detrás de sus sueños, ignorando el recorrido sin entender que renuncian a la existencia, sin saber que la muerte no está al final sino que es una elección en el ahora, cuántos cambian la oportunidad de ver un amanecer por el dinero para comprar una obra de arte que lo represente.
No le pongas valor a tu felicidad, no te vendas barato, eres sagrado, el milagro más grande es estar acá, en el justo lugar donde te encuentras, en el cuerpo que te ha tocado, con los dones que se te han dado, con un propósito sagrado que viniste a cumplir y olvidaste por correr hipnotizado detrás de tu futuro sin poderlo alcanzar, porque jamás vivirás en él, ni podrás quedarte en el pasado; sólo existe un momento verdadero, este en el cual estás leyendo estas palabras, ellas sólo existen para ti en este instante, mañana serán apenas un recuerdo, una idea, tal vez una inquietud.
Para mí son una gloriosa experiencia mientras las escribo, las percibo con la mano que se mueve presurosa intentando resumir lo que dicta el esquivo pensamiento, mis ojos repasan las imágenes formadas con el raudo movimiento, la mente revisa la manera correcta de expresarlo y el oído le pone un sonido armónico a las letras; sólo existe esta justa palabra presente, las demás forman parte del pasado y las otras las agarró de mi mente, si me descuido y no logro escribirlas, se perderán en el vació para siempre.

4/3/10

VIDA

De pronto te das cuenta de que la vida ha pasado a través tuyo y que todo ha sido vivido y superado, los momentos de mayor alegría y los más tristes o desesperados ya pasaron y tu sigues vivo, tal vez con heridas o recuerdos, con la experiencia acumulada de momentos que simplemente viviste, para bien o para mal, pero que ya se fueron.
Simplemente sucedió, no fue el resultado de un plan detallado, muchos de tus esfuerzos, la mayoría, fueron en vano, la lucha por escapar de la adversidad o por alcanzar la prosperidad fue inútil, todos esos eventos fueron el resultado simplemente del fenómeno de estar vivo.
Cuántos planes que nunca te llevaron a su objetivo, cuántas cosas que sucedieron de manera inesperada, cuántos giros dio tu vida sin que lo notaras para guiarte por un camino creado para ti y que no logras entender.
Vives simplemente porque estás vivo, amas y sueñas, intentas construir, fracasas y triunfas, ríes y lloras, logras y pierdes, has pasado por los mejores y por los peores momentos y aún sigues vivo, entonces te das cuenta de que todo pasa y tu sigues, es decir, que es a través tuyo que todo sucede pero tu permaneces.
Tu eres lo permanente y lo que sucede es lo temporal, la vida te sucede sin que puedas controlarla, planearla, dirigirla o modificarla, todo pasa, en su momento simplemente lo afrontaste, lo experimentaste y seguiste adelante, vivo y viviendo.
Subiste la cima de cada día sin notarlo y cuando alguna circunstancia generó en ti una enorme alegría o una profunda tristeza sencillamente las sentiste, llegaron y se fueron para convertirse en un recuerdo más, ya no volverán, te queda la experiencia y tal vez cuando esas emociones se presenten de nuevo tendrás más herramientas para vivirlas, solo eso.
Miras hacia atrás, recuerdas momentos que si hoy te dijeran que ibas a vivir te llenarían de incredulidad o de temor por parecerte demasiado amables o dolorosos y ya los viviste, y fuiste capaz de superarlos, de asumirlos.
Eres un valiente, un “vividor” profesional, un guerrero que acomete cada instante lleno de coraje, cada uno de esos impredecibles momentos los tuviste que afrontar en su ahora, llegaron sin anunciarse y no te dieron alternativa, pero al enfrentarlos te diste cuenta de que todo lo que necesitabas estaba en ti justo en ese momento y surgió para apoyarte en la experiencia.
Esta es una manera de usar el pasado constructivamente, como una reflexión, recordar que fuiste capaz de superar las crisis y los más maravillosos instantes de gloria y sigues ahí, de pie, jugando, viviendo, experimentando, recordando y aprendiendo mediante el ejercicio de vivir, el cual es la verdadera esencia de la vida.

3/3/10

COMPARAR


El arma más efectiva del ego para generar insatisfacción en ti es la comparación, tu mente siempre está comparando, estableciendo semejanzas y diferencias, haciendo cuentas para ver si sale ganando o perdiendo en el balance.
Comparas tu ayer con tu presente y a la vez comparas este con el futuro proyectado, tu trabajo con el de los otros, tus ingresos con los de los demás, tu mente se mantiene todo el tiempo clasificando, juzgando, adjudicando calificativos y comparativos a todo lo que percibe en el exterior, hay un fuerte sentido de competencia arraigado en la conciencia de todos, toda la vida hemos sido objeto de análisis que determinan nuestro valor en función del de los demás.
Por eso nunca estás satisfecho y si sigues comparando, nunca lo estarás, así lo que tengas y hagas sea suficiente para tener una vida confortable; si sigues atrapado en la trampa de la comparación, la casa de tu vecino será más grande y más cómoda, su vida más gratificante, su trabajo más excitante, su pareja más atractiva y sus hijos más inteligentes. Tu mentalidad superficial solo percibe símbolos externos que se ajustan a los modelos de vida feliz que has creado en tu mente.
Siempre habrá en la vida de los demás algo que tu desees y también algo que no quieras tener, sin embargo solo ves lo que deseas y no te percatas de lo que hay debajo de las apariencias, en el contexto general hay tantas cosas que deseas como que no deseas y en esa mirada objetiva te darías cuenta de que en tu vida hay un sano balance entre las dos, lo que sucede es que ya no deseas lo que tienes sino lo que otro ha logrado y por eso te amargas.
Un buen ejercicio es despojarte de todo lo que tienes, en la imaginación por supuesto, al hacer esto te darás cuenta de que es mucho más valioso de lo que suponías, que todo eso que ahora desprecias, al compáralo con lo ajeno, es justamente el fruto de lo que has decidido ser, hacer y tener, es el resultado de tu elección y lo que la vida te ha procurado en respuesta a tus deseos conscientes o inconscientes.
No te dejes atrapar en la trampa de la comparación, tus logros son el resultado de tu experiencia y tu elección, si no son lo que deseas cambia de opinión, elige de nuevo y procúrate la vida que quieres, puedes hacerlo eligiendo a cada instante quien quieres ser, que es una decisión personal y libre, nada tiene que ver con los demás, nadie puede forzarte a ser, hacer o tener lo que no deseas, solo tu puedes tomar esa opción, tu valor no depende del valor de los demás sino de la manera como tu te veas, si eliges sentirte menos afortunado, lo serás, pero si eliges aceptar con gratitud lo que la vida te ofrece, te sentirás el más bendecido de todos, porque eso que tienes ahora es justamente lo que has estado creando para ti.
Compara y siempre encontrarás motivos para quejarte y te robarás la dicha de disfrutar lo tuyo; acepta y agradece lo que tienes y sin importar lo que esto sea te sentirás feliz con ello.

2/3/10

BENDICION

La bendición del mundo eres tú, ¿no lo puedes creer? Tu sonrisa alegra el mundo, tu perdón lo santifica, tu santidad lo perfecciona y tu amor lo salva.
Bendecir es reconocer que todos somos Uno, que la luz que brilla en ti se extiende con tu decisión de irradiarla, que la paz se logra dando paz, la felicidad se brinda siendo feliz, el perdón se otorga ignorando las consecuencias del error y reconociendo que, por ser un error, puede ser corregido con la verdad.
Bendices al mundo cuando te niegas a ser herido, lo bendices igualmente cuando renuncias al ataque, cuando dejas de hacer distinciones y les das a todos tu paz y tu luz, sin guardarte nada, sin ser avaro con lo que tienes en abundancia, solo dando lo recibes, no al contrario, la bendición crece y brilla sobre ti solo cuando la ofreces sin restricciones, no tienes idea de lo que tu bendición puede hacer por todo lo que te rodea, no sabes hasta donde se extenderá y a cuantos bendecirá.
Tu sonrisa es bendición, tu paz es bendición, tu alegría es bendición, tu perdón es bendición, tú eres bendición y bendices al mundo entero con tu luz. Bendices a tu hermano cuando te niegas a compartir con él su debilidad, cuando ignoras sus errores en lugar de recalcarlos para luego sentirte generoso al otorgarle tu perdón.
Tu paz invulnerable, tu alegría constante y tu fe inquebrantable bendicen al mundo, cuando caminas por él con pasos firmes sabiendo que en todo momento estas protegido, cuidado y guiado por una Luz que nunca se apaga, vas regando tu bendición a cada paso, alcanzando con ella a todo aquel que se cruce en tu camino y que sin saberlo la recibe y la extiende, porque esa bendición es capaz de cambiar su vida en un instante.
Cualquiera que sea tu actividad o el lugar en el cual te encuentres, independientemente de lo que veas ahora o lo que consideres que tu eres, puedes bendecir sin limite a tus hermanos, eso no depende de ti, no te creaste a ti mismo, no decides cuánto poder tienes, ese poder está ahí para cumplir una función a través tuyo, no depende de ti la manera como esa bendición ha de extenderse, formas parte de un plan universal y lo que tu hagas por la paz del mundo y por su liberación jamás se perderá.
Es la imagen que has fabricado de ti mismo la que trata de convencerte de que tu solo no puedes bendecir a todo lo que te rodea, pero no estás solo, formas parte de una sola mente, de un solo cuerpo que se transforma con tu transformación, que es bendecido con tu bendición, no alcanzas a imaginar el poder transformador que tiene tu bendición en un mundo que clama por una luz que lo rescate de la oscuridad, de la tristeza y de la desesperación.

1/3/10

DESEAR

El deseo mueve al mundo, todo progreso social, intelectual, artístico y tecnológico ha surgido de la fuerza de un deseo y de su realización, pero también de él han nacido la guerra, la codicia, la violencia, la destrucción del planeta, la corrupción, el crimen y la desigualdad.
El deseo fundamental, del cual se desprenden todos los deseos, es el de ser especial, diferente y más o mejor que los demás; deseas cambiar lo que es, obtener algo, poseer a alguien, hacer algo que no has hecho, incluso algunas veces puedes desear que algo que ya pasó no hubiese sucedido, tal es el mecanismo del deseo; siempre busca modificar, mejorar o eliminar lo que ya es o fue.
Entonces el deseo se convierte en una competencia, pues para ser mejor tiene que haber alguien peor, para tener más alguien debe tener menos, para ganar alguien tiene que perder. Esta es la mentalidad del mundo y de ella surgen la envidia, los celos, la rivalidad, el miedo a los demás y a sus logros que parecen disminuirte.
El deseo es una fuerza poderosa cuando surge del impulso natural de crecimiento y realización, cuando apunta al logro del objetivo común de todos los seres: la felicidad, cuando busca forjar cambios que contribuyan a establecer las condiciones ideales de vida para cada ser humano y para todos a su alrededor.
El deseo mal enfocado te roba el momento presente pues lo convierte en un medio, siempre estarás esperando un hecho, un logro, un trabajo, una persona o lo que sea que desees, que te ofrezca por fin la oportunidad de ser feliz.
Suelta tus deseos al universo y no te apegues al resultado, no luches ni te resistas, deja la vida fluir con toda su perfección y te darás cuenta de que lo que deseas es una ínfima parte de todo lo que Dios desea para ti.
No te opongas con el capricho de que todas las cosas sean como tu quieres, la Voluntad de Dios es que seas feliz pero no a costa de la infelicidad o pérdida de otro, El sólo espera que recibas la paz y la dicha que rechazas pensando que las encontrarás en la realización de tus deseos, la única condición es que seas feliz y que no dependas para ello de nada externo.
El deseo es la ilusión de que tu propia fuerza te puede brindar una parte de un limitado tesoro destinado para unos pocos elegidos que deben competir por su consecución; el universo ofrece posibilidades ilimitadas, están disponibles para todos y no necesitan de tiempo para manifestarse.
No existe una condición especial en tu vida, en tu entorno o en tu situación vital que pueda brindarte la felicidad, no hay nada que debas hacer para alcanzarla, nadie la tiene para que se la quites, ninguna cosa la contiene, no hay un tiempo distinto al presente en el cual ella se encuentre, esa es la mentira con la cual el deseo te engaña y te priva de la única elección posible: aceptar tu regalo ahora mismo, abrir el corazón agradecido para recibir lo que Dios ha dispuesto que tengas en este mismo instante.
Y desde este estado de felicidad y confianza, tu vida comenzará a fluir sin esfuerzo, veras milagros ocurrir en ti y a tu alrededor, ellos darán testimonio de tu elección y del poder y la fortaleza que hay en ella.