4/3/10

VIDA

De pronto te das cuenta de que la vida ha pasado a través tuyo y que todo ha sido vivido y superado, los momentos de mayor alegría y los más tristes o desesperados ya pasaron y tu sigues vivo, tal vez con heridas o recuerdos, con la experiencia acumulada de momentos que simplemente viviste, para bien o para mal, pero que ya se fueron.
Simplemente sucedió, no fue el resultado de un plan detallado, muchos de tus esfuerzos, la mayoría, fueron en vano, la lucha por escapar de la adversidad o por alcanzar la prosperidad fue inútil, todos esos eventos fueron el resultado simplemente del fenómeno de estar vivo.
Cuántos planes que nunca te llevaron a su objetivo, cuántas cosas que sucedieron de manera inesperada, cuántos giros dio tu vida sin que lo notaras para guiarte por un camino creado para ti y que no logras entender.
Vives simplemente porque estás vivo, amas y sueñas, intentas construir, fracasas y triunfas, ríes y lloras, logras y pierdes, has pasado por los mejores y por los peores momentos y aún sigues vivo, entonces te das cuenta de que todo pasa y tu sigues, es decir, que es a través tuyo que todo sucede pero tu permaneces.
Tu eres lo permanente y lo que sucede es lo temporal, la vida te sucede sin que puedas controlarla, planearla, dirigirla o modificarla, todo pasa, en su momento simplemente lo afrontaste, lo experimentaste y seguiste adelante, vivo y viviendo.
Subiste la cima de cada día sin notarlo y cuando alguna circunstancia generó en ti una enorme alegría o una profunda tristeza sencillamente las sentiste, llegaron y se fueron para convertirse en un recuerdo más, ya no volverán, te queda la experiencia y tal vez cuando esas emociones se presenten de nuevo tendrás más herramientas para vivirlas, solo eso.
Miras hacia atrás, recuerdas momentos que si hoy te dijeran que ibas a vivir te llenarían de incredulidad o de temor por parecerte demasiado amables o dolorosos y ya los viviste, y fuiste capaz de superarlos, de asumirlos.
Eres un valiente, un “vividor” profesional, un guerrero que acomete cada instante lleno de coraje, cada uno de esos impredecibles momentos los tuviste que afrontar en su ahora, llegaron sin anunciarse y no te dieron alternativa, pero al enfrentarlos te diste cuenta de que todo lo que necesitabas estaba en ti justo en ese momento y surgió para apoyarte en la experiencia.
Esta es una manera de usar el pasado constructivamente, como una reflexión, recordar que fuiste capaz de superar las crisis y los más maravillosos instantes de gloria y sigues ahí, de pie, jugando, viviendo, experimentando, recordando y aprendiendo mediante el ejercicio de vivir, el cual es la verdadera esencia de la vida.

No hay comentarios: